Predicciones y apuestas deportivas
Las apuestas deportivas muchas veces son solo relacionadas con el fútbol, la hípica o el basketball, pero existe un sinfín de otros deportes, tal vez todos incluso, siempre y cuando haya personas dispuestas a arriesgar su dinero por la corazonada o seguridad de un resultado.
Muchas personas no se dejan llevar por el instinto sino que hacen de las apuestas deportivas casi una ciencia. Los apostadores profesionales mezclan factores psicológicos, motivacionales, biológicos, climáticos, personales, etcétera.
Por ejemplo, en el fútbol, en algunos países donde las distancias que recorren los equipos son muy largas, los viajes son tomados en cuenta por los apostadores a sabiendas que agotan al equipo. En Sudamérica, donde algunos partidos se juegan a más de 2.000 metros de altura, se toma la localía de determinados equipos como un factor determinante a la hora de realizar apuestas deportivas, y obviamente desde las casas especializadas, se toma en consideración para marcar las cuotas correspondientes.
A pesar de todo, no dejan de ser factores algo subjetivos para las apuestas deportivas, porque tanto el fútbol como cualquier otro deportes está plagado de sorpresas, de ganadores que ni los propios participantes hubieran imaginado, de suerte, de ventajas anti deportivas, de lesiones, etcétera.
En definitiva, los deportes son jugados por seres humanos, no máquinas, por ello tienen una gran posibilidad de ir en contra de los pronósticos de las apuestas deportivas. Hasta en aquellos donde los hombres tienen menos participación a primera vista, como las carreras de galgos, las apuestas deportivas dependen de la mano de algún hombre, ya sea quien prepara la pista o dedica su vida y su trabajo a la crianza y entrenamiento de los perros.
Otra forma de llevar adelante una estrategia que aumente las posibilidades de acertar las apuestas deportivas es un uso eficiente de las estadísticas, las cuales, al igual que todo lo descrito anteriormente, en algún momento se cortan o terminan.